Ana no puede controlar este comportamiento ni sus emociones, por las que sufre y se atormenta, sintiéndose culpable. En el fondo sólo querría estar bien consigo misma y con los demás: ser feliz. Sin embargo, su conducta autodestructiva hace aislarla aún más. Ana padece lo que los psiquiatras llaman Trastorno Límite de la Personalidad o síndrome borderline. Pero ella no lo sabe.
Para muchos la mejor película del festival, para mi un coñazo absoluto. Estas es una de las películas que las amas o las odias y a mi hoy me toco en el peor grupo.
Yo entré con muchas ganas a la sala para ver una de las que veían favoritas de ganar el festival, y así lo fue. Pero cuando llevas media hora de visionado y el primer plano casi no varia te temes lo peor.
La cinta para los recursos que tiene están muy bien, la historia que cuenta es fantástica, Marian está espléndida en su papel pues ¿qué le falta a la película? dinamismo.
La película es Marian, ella se sobra y se basta para contar la historia, una historia que te atrapa, pero a veces necesitas una vía de escape la cual no tienes, ves la película y te agobia de tal manera que tienes ganas de salir de la sala.
Una película muy cruda que cuenta la historia de Ana, una chica solitaria que se autolesiona, que toma drogas para poder soportar su realidad. Se siente sola porque se aisla en su mundo, el cual quiere cambiar para ser feliz pero ella misma lo impide.
Y siendo todo tan positivo ¿por qué la película no acaba de gustar? porque los primeros y primerísimos planos y solo lloros y llantos al final 98min te acaban por desesperar
Lo mejor: su protagonista
Lo peor: el agobio de la cinta
Nota: 6/10
PD: bebiendo las penas
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