No se si es que Pixar nos tiene muy mal acostumbrados, a unas películas de dibujos cada vez más centrados en sentar a toda la familia alrededor de la televisión y sobre todo en los mayores siempre más reacios a ver películas de animación, pero esta cinta es única y exclusivamente para los más peques porque para el resto de los mortales es infumable.
Nos cuenta la historia de Drácula cansado de que los humanos lo maltraten pues construye un hotel como refugio para los monstruos. Pero todo se complica en el 118 cumpleaños de su hija y cuando entra por la puerta del hotel un humano. Ya está todo dicho no busquéis un sketch gracioso o algo para rememorar porque no tiene nada. Una historia más que usada sobre un padre sobreprotector y como tiene que dejar a su hija vivir y cometer sus propios errores.
Y desde aquí hago una petición personal porque es algo que me da muchísima rabia y no hay manera de que lo cambien, es que los famosiyos de turno se vuelvan por un día dobladores. Me horroriza, hay gente que vale y otra que no pero solo por vender más o decir 'Oh, voy a escuchar la voz de Bustamante en una película' pues creo que no va a tener más audiencia. Claro ejemplo ' El espantatiburones' una buena película pero Fernando Tejero es horrible, o Tadeo Jones que salía Iniesta, sobre todo conocido como hombre locuaz y en esta pues les tocó el turno a Mario y a Alaska, que como la fama es efímera se están agarrando a todos los proyectos posibles pero ya son cansinos.
Así que una peli para ver con los más peques de la casa y ya está, solo la verán una vez y después se olvidarán al ritmo que comen chucherías.
Nota: 4/10
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